La Rioja es una comunidad autónoma que cuenta con una gran riqueza natural. Sus 21 áreas protegidas son una muestra de ello. Cada una de estas zonas es única y ofrece multitud de posibilidades para descubrir la biodiversidad y la belleza de la región.
Una de las áreas protegidas más conocidas es el Parque Natural Sierra de Cebollera, que cuenta con más de 23.000 hectáreas de bosques de hayas, robles y pinos. En él es posible encontrar animales como jabalíes, corzos, ciervos y aves rapaces. Además, cuenta con numerosos senderos que permiten recorrerlo a pie y disfrutar de su flora y fauna.
Otro de los lugares más visitados es el Parque Natural de los Sotos del Ebro, un espacio que se extiende a lo largo de 43 kilómetros de río. En él se encuentran algunos de los bosques de chopos más importantes de Europa, además de numerosas especies de aves y mamíferos. Es un lugar ideal para recorrer en canoa y disfrutar del paisaje y la tranquilidad que ofrece el río.
La Reserva Natural de los Sotos de Alfaro es otro de los lugares destacados de la región. Se trata de una extensa zona de márgenes y riberas del río Ebro donde se encuentra una importante colonia de aves acuáticas, como garzas reales, garcillas bueyeras y cigüeñas. Además, en la reserva también es posible encontrar otras especies como el nutria europea o el mejillón de río.
La Rioja cuenta con numerosas Áreas de Reserva en las que se protegen, estudian y recuperan las especies más amenazadas de la región. Entre ellas destaca la Reserva de los Cameros, que cuenta con una gran diversidad de especies y es uno de los lugares más importantes de la Península Ibérica para la conservación del visón europeo.
En definitiva, la variedad de áreas protegidas de La Rioja permite descubrir la riqueza natural y cultural de la región a través del turismo activo y sostenible, y contribuir a su conservación y desarrollo económico.