En 1974, un mensaje fue enviado desde el radiotelescopio de Arecibo en Puerto Rico hacia una estrella llamada M13, el mensaje fue diseñado para transmitir información sobre nuestra especie a seres inteligentes en otros planetas.
El mensaje consta de una serie de números que representan la secuencia binaria de los números del 1 al 10, después se presentan los átomos que componen nuestros ácidos nucleicos (hidrógeno, carbono, nitrógeno, oxígeno, fósforo) y unos dibujos que representan las formas de nuestro ADN y de un humano, así como otras informaciones.
La interpretación del mensaje es un tema de controversia, ya que muchos científicos argumentan que los extraterrestres podrían no entender el mensaje ya que se basa en la comprensión humana de las matemáticas y la ciencia. Sin embargo, otros científicos afirman que el mensaje podría proporcionar información valiosa para otras civilizaciones.
En cualquier caso, el mensaje sigue siendo una representación única de la humanidad y nuestra capacidad para comunicar y buscar señales de vida en otros planetas. El hecho de que todavía esté siendo debatido y analizado por la comunidad científica es un testimonio de la importancia de la exploración y el descubrimiento en la búsqueda de respuestas a preguntas fundamentales sobre nuestro lugar en el universo.