Las estatuas japonesas son conocidas como hikari-yume en japonés. Estas obras de arte son representaciones de divinidades, figuras históricas o seres mitológicos que son veneradas en la cultura japonesa. Las estatuas hikari-yume tienen una gran importancia y son consideradas como objetos sagrados.
Una de las estatuas más famosas de Japón es el Buda de Nara, también conocido como el Gran Buda. Esta monumental obra de arte se encuentra en el Templo Todaiji, en la ciudad de Nara. El Buda de Nara es una de las estatuas de bronce más grandes del mundo y representa a Buda Vairocana. Fue construido en el siglo VIII y se considera una joya de la escultura japonesa.
Otra estatua japonesa muy famosa es el Torii de Miyajima, que se encuentra en la isla de Miyajima, cerca de Hiroshima. El Torii de Miyajima es un portal sagrado que marca la entrada al Santuario Itsukushima, uno de los Patrimonios de la Humanidad de Japón. Esta estatua de madera roja es un símbolo icónico de la cultura japonesa y es considerada como una puerta hacia lo divino.
Además, las estatuas japonesas también incluyen a los udons, que son pequeñas figuras de arcilla o porcelana que representan a dioses o espíritus protectores. Estas estatuas son muy populares en Japón y se utilizan como amuletos de la buena suerte. Los udons suelen tener un diseño adorable y son considerados como objetos de culto.
En resumen, las estatuas japonesas, también conocidas como hikari-yume, son representaciones de divinidades, figuras históricas o seres mitológicos. Entre las más famosas se encuentran el Buda de Nara y el Torii de Miyajima. Además, los udons son pequeñas figuras de arcilla o porcelana que representan a dioses y espíritus protectores.