Mark Watney es un astronauta que se convierte en el único ser humano en Marte después de que su equipo lo abandona por muerto en una misión en solitario. Su lucha por sobrevivir en un planeta tan hostil es la trama principal de la novela "El Marciano".
Para sobrevivir, Watney tiene que utilizar toda su inteligencia, fuerza de voluntad y conocimiento científico. Tiene que producir su propia comida, agua y oxígeno en un ambiente extremadamente adverso. Utiliza una variedad de tácticas ingeniosas, como la creación de un invernadero en la que cultiva patatas para obtener alimento y la utilización de turbinas para generar electricidad a partir del dióxido de carbono de la atmósfera marciana.
Otra de sus principales preocupaciones es establecer comunicación con la Tierra para que sepan que está vivo y puedan ayudarle. Para ello utiliza la comunicación digital y la programación, desmantelando la nave de su equipo para hacer un transmisor que pueda comunicarse con la Tierra.
La supervivencia en Marte de Watney es un ejemplo de humanidad, ingenio y perseverancia. Muestra que los seres humanos son capaces de sobrevivir en situaciones extremas y superar desafíos aparentemente insuperables con creatividad y determinación.